Los principales retos que tiene Perú en cuanto a la gestión del agua son ampliar la red de cobertura de saneamiento en zonas rurales y mejorar la calidad del agua que llega a las viviendas. El otro gran desafío es potenciar las infraestructuras de agua potable y aguas residuales, tarea que necesita grandes inversiones y la necesaria aportación privada.

El experto afirma que el agua es un bien esencial, que en el último año ha ganado en importancia y visibilidad debido a la pandemia del coronavirus. La solución de la crisis sanitaria es justamente el agua por el uso de esta para el lavado de manos y disponer de ella en las viviendas es clave.

Su paso como alumno del máster de la Escuela del Agua aún tener ya una dilatada experiencia en el sector, y ser un profesional consolidado, le ha servido para seguir formándose y especializándose. Actualmente le está ayudando bastante en el proceso de emplear y plasmar lo aprendido en el plan nacional de saneamiento de Perú en el que está trabajando ahora.

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